En el experimento de hoy vamos a realizar un sencillo experimento en el que antes de empezar creo que muchos esperaríamos un resultado diferente.
Para empezar necesitamos un imán, un clavo y una bola de acero.
Por supuesto la bola de acero y el clavo no tienen que estar imantadas.

Acercamos la bola de acero al imán y como es de esperar esta es atraída y magnetizada. Seguidamente acercamos el extremo de un clavo a la bola de acero y también es magnetizado.

Al intentar separar la el clavo de la bola de acero, esta se separa con el clavo en vez de quedarse pegada al imán.
Creo que todos habríamos pensado que el magnetismo sería menor en el clavo al no estar en contacto con el imán, pero el magnetismo es mas fuerte en la cabeza del clavo. Al separarse poco a poco van perdiendo el magnetismo hasta desaparecer.

Volvemos a realizar la misma prueba pero con 2 bolas de acero para tener mayor distancia al imán. Como era de esperar el clavo está magnetizado con menos fuerza y ya no es capaz de separar las bolas.

Puedes ver el vídeo completo con 5 trucos o ideas divertidas con imanes y clavos.
Si te gustan los imanes, te invitamos a ver otro vídeo en el que mezclamos monedas e imanes.
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